Nuevos propósitos

Crecimiento personal

Como cada comienzo de año, vuelven las rebajas, la cuesta de enero, las dietas y el deseo de dejar de fumar; objetivos que se repiten también en septiembre, cuando acaban las vacaciones de verano y volvemos a la rutina, al trabajo o al curso escolar…

Si este es tu caso, te invito a reflexionar sobre cuál es el motivo por el que no te planteas tomar esas decisiones el resto del año y que te cuestiones, qué razón es la que te lleva a abandonar tras haberlo intentado año tras año.


Quizás sea el momento de cuestionarte ciertas creencias o patrones de conducta que repites continuamente, quizás no haya que esperar a una fecha concreta del año para tomar una decisión y al reducirla a septiembre y a enero, estés tú misma saboteándote… o quizás, tengas tanto miedo al éxito, como al fracaso…


Hoy quiero compartir contigo unas herramientas que te pueden ayudar a conseguir aquello que tanto deseas, no es una poción mágica, ni un atajo; sólo se trata de pequeñas acciones que de forma consciente pueden acercarte a la meta.


En primer lugar, define cuál es tu objetivo, es probable que si ni siquiera lo tienes bien definido, puedas llegar a conseguirlo.


Un buen objetivo se caracteriza por seguir la regla SMART (específico, medible, alcanzable, realista y temporal); es decir, delimítalo tanto como sea posible, asegúrate de que puedas conseguirlo, no te exijas demasiado y sobre todo, ponle fecha, márcalo en el calendario y ponlo en un lugar bien visible.


Es importante recordar, que igual de potente es el momento en el que decidimos tomar acción, no importa que época del año sea, lo que sí importa es que sea tu momento, que te sientas motivada y que no tengas la cabeza en mil cosas, de lo contrario, el estrés por causas externas podrá alejarte de tu objetivo.


Cuando hablo de motivación, me refiero a la intrínseca; esa que nace desde nuestro interior y que es la que realmente puede ayudarte a conseguir tu meta, la que trabaja por y para ti; porque si es extrínseca y procede del exterior… hay una alta posibilidad de que bien puedas abandonar o tras haberlo conseguido, no lo mantengas en el tiempo.


A continuación elabora una tabla DAFO, (debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades), las debilidades y fortalezas son tuyas, proceden de tu interior; mientras que las amenazas y oportunidades surgen de forma ajena a nosotros.


Por ejemplo si tu propósito es dejar de fumar; una debilidad puede ser tu tendencia ansiosa, una fortaleza tu fuerza de voluntad, una amenaza vivir con más fumadores y una oportunidad, no tener ningún bar o estanco cerca de casa.


Al inicio del artículo, mencionaba el miedo, al éxito y al fracaso, muchas veces somos conscientes de que tenemos miedo a fracasar, pero te animo a cuestionarte si quizás un fracaso no es sino un pequeño tropiezo en el camino, que se convierte en un gran aprendizaje sobre por dónde no continuar la próxima vez.


¿Y qué me dices del miedo al éxito? Sí, has leído bien… en otras ocasiones no somos conscientes de que también tenemos miedo a conseguir aquello que nos proponemos, bien porque no nos lo merecemos (en ese caso convendría revisar nuestro sistema de creencias), bien porque una vez conseguido podemos convertirnos en otra persona o bien porque nuestro entorno puede no aceptar nuestro nuevo yo.


Como ves, son múltiples los factores que intervienen en aquello que nos venden a través de los mass media como propósitos de año nuevo, tan homogéneos y sencillos para todas. Pero siento decirte, que efectivamente cada persona somos un mundo, tenemos nuestras circunstancias y nuestras creencias, así que difícilmente te puede servir lo mismo que le funcionó a tus amigas, familiares o famosas del corazón.


Deja de seguir estereotipos y modas, y detente a pensar qué quieres en la vida, en tu vida; olvídate de fechas o patrones establecidos socialmente y toma acción.


Cualquier día del calendario es bueno para empezar a estudiar inglés, a poner límites, a trabajar tu asertividad, a mejorar tus hábitos alimentario, etc.


Podría decirte que tengas buena suerte en tu propósito, pero no lo haré, porque el resultado será el fruto de tu compromiso, confianza y responsabilidad.


Y como siempre insisto… si necesitas ayuda, cuenta con el asesoramiento de un buen profesional de la materia y ten mucho cuidado con los gurús de la salud y el desarrollo personal, pues son los nuevos dioses del siglo XXI.


Patricia Pérez/ 18 de enero de 2022

Share by: