¿Por qué y cómo debemos consumirlas para digerirlas bien y obtener todos sus beneficios?

Siempre escuchamos hablar de las legumbres como algo muy bueno y rico en beneficios para nuestra salud. 

¿Pero sabes por qué y cómo debemos consumirlas para digerirlas bien y obtener todos sus beneficios?

En esta entrada vengo a contarte sobre ellas los tipos que hay, sus beneficios y cómo prepararlas para su mejor digestión.

¡Empezamos!

A mí personalmente me gustan en todas sus formas: humus, platos calientes, ensaladas, tostadas… Es algo que me gusta comer varias veces a la semana.

Cuando digo que no como carne, lo primero que me preguntan es: “¿y de donde sacas la proteína?” Aquellas personas vegetarianas o que no comen carne, me entenderán.

Pues bien, te cuento que nuestro cuerpo más que proteína necesita aminoácidos. La proteína es una cadena de aminoácidos que, en su conjunto, completa la proteína que necesita nuestro organismo.

Los aminoácidos se quedan en nuestro organismo unas horas después de comer, por lo tanto, si no has consumido todos los aminoácidos esenciales en esa comida, pero quizá los tengas en otros que consumes horas después, es posible que formes tu proteína más completa.

En mi caso es una muy buena fuente de proteínas además de otros alimentos vegetales que también las contienen. En el caso de las legumbres, tienen entre un 26% y un 40% de proteína.

Además son ricas en fibra, sobre todo soluble (aquella que atrae el agua y convierten las heces más gelatinosas para una digestión más lenta), hidratos de carbono, vitaminas del grupo B, calcio, zinc, potasio, magnesio y hierro.

Para cocinar las legumbres lo mejor y más recomendable es remojarlas al menos 24 horas. Es aconsejable este procedimiento para todas las personas y en especial para aquellas que les cuesta digerir o sienten flatulencias cuando las consumen.

Hay varios motivos:

1. Para eliminar sus inhibidores enzimáticos, también llamados anti nutrientes. Esto hace que la fibra o cáscara que las recubre no ayude a absorber todos los nutrientes.

2. Para evitar que produzcan gases. Se elimina gran parte de oligosacáridos, un tipo de hidrato de carbono que al ser humano le cuesta mucho digerir. Esto hace que no se generen bolsas de  gas en el intestino.

Si cambiamos su agua 2 veces en esas 24 horas mucho mejor.

3. Si además quieres darle un extra de nutrientes puedes germinar.  Esto hace que su valor nutricional aún se multiplique. Germinar significa que después de 24 horas las dejemos sin agua y las remojemos cada 12 horas en invierno y cada 8 en verano.

Cuando ya tengan una puntita de tallo entonces cocinar. Quizás perdamos un poco en la cocción en alta temperatura, pero otra parte se obtiene.

No se deben consumir en crudo, no es lo más recomendable. 

Algo que siempre me gusta recomendar para su mejor digestión y si queremos perder peso, es la combinación de alimentos.

Intentar consumir las legumbres con verduras y no con un hidrato de carbono u otra proteína.

Y si no tenemos problemas digestivos, puedes consumirlo sin problema con hidrato de carbono por ejemplo y así, aumentaras su absorción. Un ejemplo sería las lentejas con arroz.

ALGUNOS TIPOS DE LEGUMBRES:

-        GARBANZOS.

-        ALUBIAS.

-        HABAS DE SOJA.

-        FRIJOLES.

-        GUISANTES.

-        CHÍCHAROS.

-        CACAHUETES.

-        LENTEJAS.

-        AZUKI. (Con gran porcentaje en proteína)

Espero y deseo que te haya gustado esta información. Con ello hemos visto qué nos aportan las legumbres, cómo consumirlas para una mejor digestión y algunos tipos de legumbres.

Gracias un día más por leerme. 

Un besazo enorme y lleno de salud.

Alimenta tu belleza by Laura Hiraldo/ 10 de febrero de 2022