Entrevista a Manu Karr

Manu Karr es director de producción y editor de vídeo.

1. Bienvenido, Manu. ¿Cómo te encuentras actualmente?


Buenas, muchas gracias. Actualmente creo que ya he entrado en la etapa de depresión post-vacacional

o, no sé si es mejor decir “post-verano”. Ha sido un verano de alta intensidad y va a ser difícil de

superar. Aún estoy cargado de emociones.



2. Grabas vídeos, además de ser editor. ¿Cuándo surge tu interés hacia ello?


Suelo decir que soy más editor que operador, al menos, profesionalmente, porque me he especializado en la edición, pero me encanta grabar. Mi interés viene desde muy pequeño. Creo que es la herencia de mi padre. Él grababa con una handycam y hacía películas. Luego, yo tomé su testigo.



3. ¿Qué significa para ti esto?


Para mí grabar significa recordar en un futuro. Significa mucho. Todos podemos observar algo, pero la mirada es única. Los dos podemos observar un atardecer y nos puede parecer precioso, pero la

manera en que lo miras, lo determina todo. Para ti un atardecer podría ser el final de un día perfecto,

para mí puede ser un abrazo de despedida o la persona con la que lo compartiría. Así que para mí

grabar es un registro emocional, el no sólo lo que grabas, sino cómo y en qué contexto. Y todo el

mundo, incluso el que te dice que no quiere que lo grabes, luego quiere recordar.



4. ¿Cuál es el trabajo que más te ha gustado realizar?


Aquí tendría que dividirme entre lo profesional y lo personal. Respondiendo por lo primero, el trabajo

con el que más me he involucrado y que, creo, me hizo crecer profesionalmente fue el cortometraje de

Miércoles de mi amigo, que es ya un hermano, Jesús Vega Brando. Ahí abarqué todo lo que podía

abarcar y más. Empecé siendo el auxiliar de edición, que no es lo mismo que un segundo editor, tiene

otras funciones más coordinadas y de organización para todos los departamentos de postproducción. Y acabé ejerciendo también de operador de making off, de grafista y hasta salgo de figurante. Aún así en esta profesión no es sólo la técnica; un rodaje, una edición, pueden ser muy intensos. Todos acaban agotados, pero nadie quiere realmente que acabe, todos queremos siempre volver a rodar, sobre todo. Y si tuviera que responder a nivel personal, sería el último vídeo que le hice a mi hermana melliza, que es diferente a los demás porque el vídeo es sobre ella, pero nos configura, al mismo tiempo, la relación que tenemos como hermanos y qué lugar ocupamos en la vida del otro.



5. ¿Qué trabajo te encantaría realizar?


En cine y sin irnos a lo utópico, me encantaría rodar, editar o participar en algún found footage de

terror. A nivel personal, tengo dos cosas: documentar el proceso de búsqueda de la destinataria de un mensaje en botella que encontré, que eso lo veo lejano, o, el día de mañana, hacer una especie de retrato documental al estilo “indie” y muy libre sobre el cantautor gallego Luis Fercán, quien es, además, mi cantautor favorito porque es con quien mejor he conectado musicalmente.






6. ¿En qué te inspiras a la hora de grabar?


Me gusta la espontaneidad. Por eso tengo tantos gigabytes y tantos discos duros. Tienes que grabar

mucho y acostumbrar a la gente de tu alrededor para que sean reales con la cámara como si la cámara fuese una extensión más de ti. No hay mucha historia detrás de eso, al final, soy heredero del vídeo doméstico.



7. ¿Tienes algún ídolo a seguir?


En el cine tengo mis referentes. Me gusta el cine de Christopher Nolan, M. Night Shyamalan, Ridley

Scott, Jordan Peele, Robert Eggers, James Wan, Ari Aster, David Fincher, el equipo que hacen Aaron

Moorhead y Justin Benson. De más pequeño consumía más a Spielberg. Si nos vamos a España, sobre todo Paco Plaza y Jaume Balagueró. 

En televisión, toda mi vida me han acompañado producciones de Álex Pina, ya que mi infancia la marcó Los hombres de Paco y, de más adulto me pegó mucho La casa de papel; aunque de Pina en TV habré visto casi todo. Esto es a grosso modo, porque aquí me refiero sobre todo a cineastas de los que soy más seguidor, pero luego hay muchas películas que me gustan y son de otros directores y directoras, tanto conocidos como desconocidos y tardaría mucho si me pusiera a enumerar uno a uno. Por citar a alguna directora, Carlota Pereda iría en la línea de lo que me gusta. En general, consumo mucho thriller, found footage, terror y “cine raro”.



8. ¿Quién es Manu Karr?


Creo que esta es la pregunta más difícil. Manu Karr nace como un nombre artístico con el que firmar

mis “producciones”. Quería separarlo un poco, como si fuese una personalidad, mi “parte visible”. Lo

que ocurre es que la gente al mezclar contenido personal, me atribuía valores muy positivos y veía

todo demasiado bueno para mi gusto, cuando yo, por ejemplo, he pasado muchas malas rachas. Y me

agobiaba un poco que mi ventana al pequeño mundo que me rodea fuese “hiperpositivo” y se

desvirtuase de lo real. Empecé a publicar entonces también mis reflexiones más íntimas, a veces en

texto, a veces en vídeo narrado, y creo que eso me completó un poco más. No sé hasta qué punto

Manu Karr es yo mismo, pero creo que no podría responder a quién es Manu Karr sin responder antes

a quién es simplemente Manu. Y no sé aún si sé responder a esa pregunta. 

Una amiga me dijo una vez que era “la memoria de la gente”. Y creo que eso puede ser lo más cercano a lo que sería mi esencia.

Siento que soy el custodio del recuerdo de quienes me rodean y voy dejando testigos de ello: notas en

cuadernos, fotos, vídeos; todavía creo en escribir cartas y postales… Soy un poco todos ellos.

También conservo incluso un mensaje en botella que encontré de crío; y ese hecho marca mi vida y

me acerca aún más a una de mis relaciones más importantes que es mi relación con el mar. Así que sin alargar esto mucho, ¿quién es Manu Karr? Nadie tan importante por sí solo. Quizás la parte más

visible de mí o la que siento que hasta cierto punto puedo mostrar. 



9. ¿Con qué tres palabras te definirías?


Melancólico, náufrago y humano.



10. ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?


Lo que más, bucear. Lo he hecho toda la vida en apnea y, recientemente, me saqué la primera estrella

de FEDAS para poder hacerlo con botella. Es terapéutico para mí. Luego hacer ejercicio, que intento no abandonarlo nunca; hacer urbex, que es, básicamente, explorar sitios abandonados, y me da ese subidón de adrenalina. Y rodearme de mi gente. Soy un poco solitario, pero luego me gusta estar; no necesito un gran plan, a mí me das una buena conversación y podría estar sentado en un bordillo toda la noche.



11. ¿Por qué siempre mencionas la palabra “náufrago”? ¿Qué significa para ti esa palabra?


Para mí decir “náufrago” es una manera de definir un estilo de vida muy conectado al mar y al presente. Ser un náufrago es afirmar que aunque la tormenta arrecie, sobrevivirás. Y sobrevivir es decir adiós no sólo a personas, sino a las versiones de ti mismo que fuiste antes. Es alguien que convive con sus recuerdos pero que vive al día porque como dice el famoso personaje de Tom Hanks “mañana saldrá el sol y quién sabe qué deparará la marea”. 

Vive solo, tan libre como preso, pero nunca deja de buscar.

La menciono mucho porque no siento que encaje en el ritmo frenético de la ciudad, donde ni siquiera

la gente tiene tiempo de saber cómo están más allá de contestar a lo que hacen. Podría vivir y morir en

una playa, me gusta estar despeinado y dejarme la sal. Me siento más vivo y libre bajo el agua y

privado de aire que fuera. Soy feliz así. He pasado mi infancia acampando en extensas playas de

dunas de arena y gran parte de mi vida sin cobertura cada cinco días o durante unos tres meses seguidos en una casa en una playa de Marruecos. Y cuando pasas un tiempo en “mitad de la nada”, te encuentras. Y encuentras el valor de lo importante de con quienes te tropiezas en el camino, las

conexiones interpersonales.

Y todo el tema de empezar a decir esta palabra, “náufrago”, viene porque cuando era pequeño rescaté un mensaje en botella. ¿Cuántas probabilidades había de que de todas las playas, de todos los mares y de todas las personas, lo encontrara yo? Siempre lo cuento como “la historia de mi vida”. Pero no es mía. El mensaje es un poema de un marinero, Maksym, a su amada a la que llevaba sin ver siete meses. Nunca me desprendí de esa carta. Así que siento que soy un poco lo que queda de ese marinero y me siento responsable. Sobrevivo y espero ser un recuerdo bonito para alguien cuando ya no esté, ese será mi mensaje en botella.



12. ¿Cómo ves tu vida de aquí a un año?

No la veo. Pero ojalá con muchas más historias y anécdotas, viendo crecer a la pequeña Carla que está por llegar y que, he decidido creer, será la persona a la que le daré todo, y más cerca de un trabajo fijo que me permita viajar más, compartir más y vivir más.



13. ¿Algún plan personal y/o profesional que nos puedas adelantar?


Bueno, estamos casi en la distribución de un cortometraje para el que he sido el editor y también el diseñador de créditos, entre otras cosas. Dani & Billy de mi compañero y amigo Egoitz Carpenter, que

es su ópera prima como director. Y estamos muy contentos con el resultado, también impacientes

porque vean los créditos, porque ha sido una locura hacerlos, y ojalá pronto poder verlo en algún circuito de festivales.


Malena Ramos- @malenaramoss/ 5 de Noviembre de 2024

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